CARPINUS COREANA, 19 AÑOS. Bonsái importado de Japón
Bonsái importado de Japón. Carpinus coreana. 19 años.
Árbol caducifolio que destaca por la rugosidad de su tronco grisáceo, el cual se va agrietando con el paso del tiempo. Esta característica le dota de ese aspecto añejo tan apreciado en este arte.
También goza de gran popularidad gracias a la belleza de sus pequeñas hojas lanceoladas y dentadas que se tornan en preciosas tonalidades amarillentas, a su floración monoica y a la agrupación en racimo de sus frutos.
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Su resistencia y gran capacidad de adaptación a nuestro clima mediterráneo le confieren gran carácter a este Carpinus. Además, la originalidad de su corteza y sus pequeñas hojas hacen de estos ejemplares un gran acierto para una bonita colección.
Este ejemplar es único, tiene una altura de 46 cm y el grosor de su nebari es de 4 cm. Incluye una maceta redonda de 24x9 cm (“diámetro x profundidad”). Al adquirir este ejemplar se asegura una compra exclusiva ya que este árbol procedente de Japón es único en el mundo, no existe otro igual.
Foto real del árbol.
Ficha técnica
CARPINUS COREANA
SITUACIÓN
Viven muy bien en el exterior al sol, pero en pleno verano deberemos ubicarlos en lugares ligeramente umbríos. Pueden soportar las heladas.
RIEGO
Requieren riegos frecuentes en primavera y verano, cuando crecen con fuerza. En invierno el riego deberá espaciarse. Para mantener las raíces en buen estado, es importante no regar en exceso dejando secar ligeramente la tierra entre riegos.
ABONADO
Abonaremos especialmente en otoño con abonos líquidos y sólidos de disolución lenta (periodización semanal y mensual, respectivamente), así como en primavera.
TRASPLANTE
Cada dos años, durante el invierno. Durante el proceso se debe eliminar la tierra vieja y recortar dejando una corona de raíces. Desde Garden Rivas recomendamos mezclar un 70% de sustrato Akadama con un 30% de Kiryuzuna. También se puede añadir carbón de bambú (entre un 2 y un 5% de la mezcla).
PODA Y PINZADO
Se recomienda podar al final del invierno cuando están sin hojas y especialmente cuando la ramificación es muy fina. Se deben pinzar los brotes que se alargan demasiado durante la primavera. Si además defoliamos, la ramificación se densificará rápidamente y el tamaño de las hojas se reducirá. La defoliación es mejor realizarla en la época veraniega y esta debe ser parcial, retirando la capa exterior de las hojas para permitir la entrada de luz en el interior del árbol.
ALAMBRADO
Se debe realizar en invierno, momento en el que nuestro árbol carecerá de masa foliar, para que el proceso sea más sencillo y no se dañe la brotación. Es importante no dejar que se marque el alambre en la madera ya que esta variedad se caracteriza por un crecimiento vigoroso lo que puede dar lugar a que se marque con facilidad.
*La forma y las medidas de los bonsáis son aproximadas. Se debe tener en cuenta que un bonsái es un ser vivo.
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